Hace algún tiempo leí en un blog a una mamá reciente que decía algo así como "por suerte no leí a Laura Gutman", me dio gracia porque cuando lo leí sentí que esa mamá creía que Gutman era algo así como un "cuco", un personaje de libro que se atrevía a proponer cómo criar a nuestros hijos. También pensé que en realidad era una lástima que no la hubiera leído...porque tal vez hubiera tenido mejores herramientas para atravesar ese momento duro por el cual estaba pasando.
Yo llegué a Laura Gutman de pura casualidad, lo compré un día pensando que era un libro de autoayuda (detesto los libros de autoayuda, pero en ese momento estaba tan mal que necesitaba uno) y me llevé tamaña sorpresa. Hoy, después de haber leído todos sus libros, ya he tomado distancia. Con esto quiero decir que he llegado a un punto en el cual puedo criticar algunas cosas de su pensamiento. Pero eso no la hace perder el valor que tuvo para . Destaco para mí, porque lo que le sirve a una puede no servirle a otra. Pero de algo estoy segura: Laura Gutman no es un "cuco", no hay que tenerle miedo. Te puede gustar o no, lo podés necesitar o no. Hay mamás que están muy conectadas a sus bebés y no necesitan ningún libro. Yo lo necesité...estaba muy desconectada de esa bebé que era Guille. La amaba, era super feliz, pero en algún lugar el vínculo estaba dañado. Después de leer "La maternidad y el encuentro con la propia sombra" desandé caminos, revisé legados, revisé mi historia y pude encontrar ese lugar que no le había dado a mi hija, ocupada como estaba en llorar mi propio desamparo. No es un camino fácil. Pero es el que nos tocó transitar. Tengo mucho que agradecerle a Laura Gutman y otro tanto que agradecerme a mi y a mi hija.
Aquí un video hermosísimo en el cual Laura Gutman habla de algunas de las ideas sobre las cuales trabaja en sus libros. Habla de la fusión emocional con el bebé, de la necesidad de contacto físico de los niños y de la importancia de que los adultos seamos conscientes de nuestras emociones y demos lugar a las emociones de nuestros chicos. Nuestros hijos no son seres a quienes disputarles algo (el tiempo, mirada, cobijo que no recibimos nosotros mismos), sino personas que deben ser criadas con respeto y amor genuino. Mírenlo, es un video hermoso ;-)



Gracias a varios de mis contactos que lo publicaron en el FB, esta vez se lo robé a Ale Elena de Liga :)