Ayer, después de dos años de sostener una intensa relación de amor/odio, pude terminar con "Crónica del pájaro que da cuerda al mundo" de Murakami. Obvio que en el medio leí otras cosas. Lo dejé muchas veces convencida de que ya era suficiente, sin pensar en retomarlo (hay una parte MUY TEDIOSA!). Hace un par de semanas Lucía, en una charla sobre libros, me dijo "no me acuerdo de qué trata, pero sé que me gustó leerlo". Yo naturalmente aún recuerdo de qué trata (probablemente lo olvide en los próximos meses) pero puedo decir que fue una buena experiencia leerlo, sobre todo la segunda parte, que disfruté un montón. 
No sé si lo conté acá, pero ese libro tiene una narración que considero increíble y es la historia del Teniente Mamiya, un tipo que vio cómo desollaban vivo a otro. Si bien me sentí mal durante una semana, tengo que decir que la forma en la cual se narra el suceso es deslumbrante. Creo que es una de los mejores fragmentos narrativos que he leído en mi vida. 
Lo que me jodió de la novela esta (y no es algo que aparezca en sus otras novelas) es la permanente alusión a "lo otro", "lo siniestro", "ellos", sin ponerles nunca un nombre (pueden ser aliens o "gente mala que vive en otra realidad" o "gente de los sueños" o zombies o lo que quieras). Digo, es una apuesta inteligente como narrador, pero hincha un poco que sea reiterativo. Fue un libro árduo de terminar. Y ojo, que soy muy partidaria de dejar los libros abandonados si me aburren, pero este ejercía sobre mi un extraño poder, del tipo "tengo que terminarlo".
Hace unas semanas, pedí recomendaciones de libros porque recibí algo de dinero en navidad, estos fueron algunos de los libros que  se mencionaron:

La historia del amor (Nicole Krauss)
La voz dormida (Dulce Chacón)
El lápiz del carpintero (Manuel Rivas)
Los galgos (Sara Gallardo)
El libro del hambre (Nothomb)

Cuando fui a la librería no conseguí ninguno, así que aposté a lo que sé que me gusta y compré uno de Paul Auster y otro de Siri Hustvedt. Tengo también "Mujeres tenían que ser" de Pigna. Por ahora, esas serán mis lecturas de verano. 
Me causa un enorme placer dormir a mis niños a las 10:30pm y tirarme en la cama a leer hasta tarde. Estoy disfrutando mucho de esa actividad de "vacaciones". 
Creo que esta noche empiezo el de Paul Auster.