Cápsula del tiempo (4) Edición aislamiento
16 abril 2020
Lo ví en facebook y me gustó guardarlo aquí y agregarle cosas de mi vida, al estilo de "cápsula de tiempo" del aislamiento.
Hoy, 16 de abril de 2020, así pasamos el aislamiento por la pandemia COVID19 en el mundo/Argentina/ nuestra casa.
- Hay que llevar un certificado para salir.
- El precio de la NAFTA está a $60 aprox.
- Las escuelas llevan cerradas ya 4 semanas.
- Hay líneas dentro de los negocios para distanciar a la gente.
- Los negocios y empresas no esenciales están cerradas.
- Los parques y lugares de paseo no son accesibles para el público.
- Todas las competiciones deportivas se cancelaron (incluyendo las Olimpíadas 2020).
- Los conciertos, festivales, eventos de entretenimiento se cancelaron.
- Las bodas, celebraciones familiares, reuniones de vacaciones se cancelaron.
- Las iglesias están cerradas.
- No se puede salir con nadie fuera de casa.
- Los parques de juegos exteriores para niños están cerrados.
- Tenemos que alejarnos unos de otros a más de un metro.
- Escasez de máscaras y guantes en los hospitales.
- No hay suficientes respiradores artificiales en comparación con a gente que podría llegar a necesitarlos.
- Sólo podemos salir a supermercados y farmacias a comprar productos de primera necesidad.
- Los gobiernos cerraron las fronteras a todos los viajes no esenciales. Están cerrados los aeropuertos.
- Se imponen multas para aquellos que quieran quebrantar estas reglas.
- Las rutas están casi vacías.
- Gobierna Alberto Fernández, que fue electo el año pasado y asumió el 10 de diciembre de 2019 en medio de un festejo popular histórico. Su vice es CFK. Volvimos.
- Esta cuarentena la pasamos en casa: Guillermina (12 años), Emilio (8 años), David (45 años), Luisina (41 años), Frida (17 años), Pugliese (8 años aprox.).
- Guillermina está en séptimo grado, Emilio en tercero. Maestras de Guille: Paula y Susana. Maestras de Emi: Dianela y Ayelén. Van a la Gurruchaga.
- En casa de mis suegros: la abuela Mirta (72 años), el abuelo Armando (76 años), la bisabuela Olga (99 años). Lucy, la perra, murió el año pasado.
- Vivimos en el departamento de calle Salta que reformamos el año pasado en un obra que nos dejó sin ahorros y con algunos saldos de tarjeta.
- En la cuadra solo están abiertos: "Saturno" (supermercado), Marcelo (verdulería) y "Almacén del celíaco" (productos para celíacos).
- El dólar está $85 (pero hay varios tipos por impuestos y demás, algunos llegan a $108).
- Se registra la bajante más importante del Paraná desde 1989 (se ve el canal!).
- Una semana antes del aislamiento fue la marcha del 8 de marzo. Fui con la tribu.
- AF prometió que este año se debatirá la ley del aborto.
- Somos socios de Rosario Central.
- Soy profesora titular en la Técnica 2 e interina en la Urquiza. Tengo 30hs cátedra. Estamos dando clases online (a través de google classroom y herramientas varias).
- Soy fotógrafa de familia: newborns, maternidad, niñxs.
- David es carpintero.
- Tengo brackets.
- Mi psicóloga es Wanda Donato.
- Venimos de 4 años muy difíciles por el gobierno de Macri y ahora esto.
- Tengo facebook.
- Tengo instagram.
- Tengo flickr.
- Tengo twitter.
- Tengo whatsapp.
- Estoy llevando adelante un proyecto 366 (este año es bisiesto). Pueden verlo en: #luisinaserenelli2020
- No tengo tik-tok, pero es una app nueva que usan muchxs adolescentes.
- Tengo a mis hermanas Analía (46) y Andrea (51).
- Mis amigas: Marcia, Aye y la tribu (somos 22).
- Lxs amigxs de David: Erika, César, Javi.
- Lxs vecinxs: Rosendo, Belén y Esteban, Ernesto.
- Lxs amigxs de Guille: Valentino, Facundo, Joaquín, Mariano, Isabel, Salvador, Agustín, Donato, Gregorio.
- Lxs amigxs de Emi: Gregorio, Donato, Antonio, Felipe (x2), Julián.
- Vimos series, comimos rico (y mucho), leímos, hicimos los deberes escolares, trabajamos, nos preocupamos. No hicimos nada de la casa.
- Este verano nos fuimos de vacaciones a Alpa Corral (Córdoba).
- Tenemos el mismo Golcito que hace mil años.
- El aislamiento empezó el 20/3/2020. En enero y febrero, aunque sabíamos que algo raro estaba por pasar, jamás imaginábamos que nos íbamos a encerrar en casa.
Hasta ahora, solo había escrito estas cápsulas los años en donde había mundiales de fútbol. En 2010 estábamos así, en 2014 así y la última fue en 2018.
Terrazas
14 abril 2020
Hoy comimos un asado en la terraza. Bastante improvisado la verdad, pero igual de satisfactorio. Nos dio el sol de lleno en la cara, el vientito fresco de este otoño que nos encuentro encerrados.
Los vecinos están usando sus techos como terrazas improvisadas. La mayoría no tiene ni barandas. Hay una familia que tiene una hija de unos 8 años corriendo en un espacio de 4x4 sin barandas. Imagino que abajo no dan más. El resto sufrimos viendo a su hija correr.
Otro señor apareció un día en la terraza en calzoncillos. Claro, ahí arriba nunca hay nadie y de golpe la cuadra entera sube un par de pisos. Después nos reconocemos en la cola del supermercado, David entra declarando que se hizo amigo del tipo que sube en calzones.
Nuestra "terraza" es un desastre, pero nos viene bien, la aprovechamos y agradecemos.
De golpe, la vida se desplazó hacia arriba. El lugar privado en donde muchos se fumaban un pucho de tanto en tanto se volvió público.
Tiempo extraño de habitar terrazas.
Día 25
13 abril 2020
¿Algún día volveremos a nuestra vida normal? Una foto de febrero, en mi estudio.
Vivimos en un departamento de pasillo. Atrás de todos los departamentos, hay un edificio de dos pisos con poquitas unidades. Entre el año pasado y este se fueron varios vecinos y los departamentos quedaron vacíos, así que la pandemia nos encontró a pocos aquí. En el edificio quedaron solo 3 vecinos, dos viven solos y también hay una pareja. Ayer subí a la terraza a despejarme un poco y me quedé dos horas hablando con la pareja. El muchacho me contó pormenorizadamente una historia larguísima sobre los motores de los autos. A mi nada me importa menos que los motores de autos, pero lo escuché con atención con tal de hablar con alguien. Hablamos mucho tiempo, por supuesto respetando la distancia. Nos despedimos contándonos lo bien que nos había hecho charlar con otras personas.
Desde que dejaron de ir a la escuela, hace 4 semanas, no paré de luchar con los piojos. Cuando logro exterminárselos a Guillermina, le aparecen a Emilio. Por momentos me canso y los dejo con piojos hasta que veo que se rascan mucho y vuelvo a comenzar la guerra. Ahora mismo lo tengo a Emi embadurnado con el antipiojos. Presuntamente Guille no tiene. Nadie puede asegurarlo, hay que esperar unos días. Como con el covid19.
Hoy tuve que salir, no había nadie en la calle y manejé algunas cuadras sin ver ningún auto. No hay nada más relejante que manejar. Aproveché para pasar por el estudio y ver que todo estuviera en orden. Me dio una nostalgia terrible y la incertidumbre de si algún día volveremos a nuestros trabajos, recuperaremos la normalidad, nuestra vida aburrida de antes.
En aislamiento
12 abril 2020
El ParqueVillarino horas antes de que se decretara el aislamiento, 19 de marzo de 2020
Tuvo que arrasar la pandemia para que volviera por acá. Si bien llevo un diario escrito a mano, no siempre tengo la motivación necesaria para escribir. Tal vez finalmente me habitué a escribir en teclado y la mente se libera más fácil que con la cursiva.
Hoy se cumplen 24 días del aislamiento social, preventivo y obligatorio decretado por el gobierno nacional. En realidad se cumplen mañana cuatro semanas completas sin clases. Y por supuesto, esos días extra también los tuvimos en casa.
La última vez que fui a la escuela fue la semana del 16 de marzo. Las cosas estaban poniéndose raras en Italia y España y en Argentina había menos de 10 casos de covid-19. El 7 le festejamos el cumple a Guille y esa semana del 16 ya estuvimos encerrados en casa. Pero después fue peor. Ahora, 24 días de encierro empiezan a pesar.
El jueves 19 de marzo sabíamos desde temprano que el gobierno nacional evaluaba el aislamiento (cuarentena) para esos días, por lo que adelanté una sesión que tenía prevista para ese fin de semana en Zavalla. Cuando llegué el parque Villarino estaba cerrado y tuvimos que saltar la cerca perimetarl para entrar. Había llevado a los chicos y a David, ya que llevaban una semana encerrados y tuve la intuición de que iba a ser la última vez que salieran en un buen tiempo. Juntaron nueces y jugaron a la pelota en un parque desierto. Yo hice las fotos de Daniela, que aún no entregué porque estoy tan abúlica que no consigo ponerme al día. Ese día parecía que venía el fin del mundo, el parque silencioso y desierto, apenas hablé durante la sesión porque realmente sentía que cualquier sonido rompía un silencio raro, espeso.
Al otro día desayunamos y nos sacamos fotos. Tenemos la comodidad de la clase media: casa propia y lo mínimo indispensable garantizado. Al principio ese aislamiento era una novedad y lo exploramos como quien explora el lugar de vacaciones al que acaba de llegar.
De a poco se fue sintiendo más extraño y los sentimientos van cambiando incluso durante las horas que conforman un mismo día.
A mí no se me hace más fácil con el correr de las semanas.
Pero no me quiero olvidar de esto. No me quiero olvidar de nada.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)
Luisina Serenelli
Docente // Fotógrafa // Blogger //Feminista // Doula// Escritora // Lectora incansable // Mamá de Guille y Emi // Enamorada de David // En permanente deconstrucción y construcción