de cabeza! (197/365)
De cabeza! (197/365)


Acá andamos, sin tiempo para nada. No sé por qué los días se me pasan volando a pesar de estar desempleada. Recién ahora me estoy adaptando a "estar en casa" todos los días de la semana. No puedo decir que me disguste, es lindo y relajante; pero tampoco lo vivo como el cumplimiento de un sueño...así que hubo que superar la instancia de frustración.
Igualmente paso bastante tiempo ocupándome del incipiente negocio. De a poco salen trabajos y se ven buenos resultados, avances. Eso me da satisfacción.

Y está este nuevo embarazo. Tan diferente en tantas cosas al otro. Por ahora estamos en el camino de conseguir un médico respetuoso. Dificilísima tarea en Rosario. Fui a consulta con Jaime Lardizábal, me cayó bien y tiene varios puntos a favor (ha atendido ya varios PVDC, está en mi obra social y espera hasta la semana 42) y puntos en contra (básicamente trabaja en una institución). Hablé por teléfono con Cristina Giménez y tengo pendiente una entrevista con ella, sus puntos a favor son que atiende partos en casa, la contra es que no atiende por Médicus. Como sea, a ambos les aclaré que la decisión de quién va a acompañar mi parto va a ser tomada mucho más adelante, que sólo estoy viendo cuáles son mis opciones para este camino. 

A Lardizábal le expliqué cuáles eran mis expectativas, pero aún no discutí ningún "punto fuerte" con él. Igual ya empieza a resignarse y la verdad es que me tiene paciencia. No me hice los análisis de sangre del primer trimestre porque se me venció la orden (sí, así de despelotada soy) y cuando se lo dije no me dio mucha bola, ni me "retó" ni nada de eso. Supongo que se imagina que no puede tratarme como a una niña porque esta vez no los voy a dejar. Igual fue bastante infantil (de mi parte) pelotudear con los análisis, ojo...no estoy diciendo que esté bueno. Después quiso darme una orden para hacerme la translucencia nucal, le puse tal cara que instantáneamente suspiró y me dijo "no la vas a hacer, no?". Y no, no me voy a hacer la translucencia. Él arguye que los padres siempre tienen miedo y que cuando el estudio da bien se sacan un gran peso de encima. Yo en cambio creo que los miedos de cada persona son diferentes. Claro que me da miedo que mi hijo tenga una enfermedad cromosómica, pero aunque el estudio me diera bien, seguiría teniendo otros miedos: que tenga labio leporino, que tenga displasia de caderas como tuvo Guille (que es una pavada, si...pero el arnés es un bajón y hay que ponerlo), que sea sordo, que mi bebé muera, que tenga un problema cardíaco, qué se yo, los miedos que tenemos todos los padres (y que tanto me cuesta escribir y asimilar que tengo esos miedos). Y la TN solo detecta enfermedades genéticas y no malformaciones (que puede haber miles!) Aparte ¿es necesaria tanta intervención?¿es necesario entrar en el circuito del "miedo"?. No sé, yo pienso mucho en esto de por qué siempre quieren asustarnos. Justamente ayer la ecografista me dijo "este bebé es más grande que lo estándar", ay por dios...casi la mando a la mierda (digan que estoy intentando no pelear, que si no), no sé qué quiso decir, estoy de 14 semanas, ya se va a emparejar. Yo ya estoy avivada y ni me preocupo por lo que me dijo, pero haciendo esos comentarios estresan a muchísimas mujeres. 

El de la 4D que me espere sentado, esta vez no me la hago ni en pedo, si quiero que me roben $300 mejor me voy a un restó de lujo.

Detesto el circuito médico tradicional. El alternativo casi no existe en Rosario. Pero a mi me sacan de mi casa con 9 de dilatación (acá voy a corregir: YO me voy de mi casa con 9 de dilatación). Así se los digo ;-)

Volví, eh?