La semana arrancó con los chicos vomitando y sintiéndose pésimo. Siguió normal y el miércoles D y yo estuvimos fatal, calculamos que nos agarramos todos el mismo virus. El jueves, medio como pudimos, armamos los bolsos a la mañana y partimos a La cumbrecita, ya que teníamos 3 noches reservadas en las cabañas Ruca-Alihuen. Este era uno de mis sueños más fáciles de cumplir: hospedarnos en el casco del pueblito y poder entrar hasta ahí con el auto. Fuimos con la familia de Marcia y la pasamos espectacular.
El viernes era el único día de la semana que me tocaba trabajar, pues pasó lo siguiente: a la noche del jueves le gatillaron un arma en la cara a CFK, el tiro no salió y dos horas después, el presidente decretó un feriado sorpresivo...aún no me explico cómo zafé del descuento. Lo que siguió, no le pudimos ver en vivo porque estábamos en otra, pero hubo mucha marcha, mucha manifestación y movilización en la tarde del viernes. Obvio el pueblito este siguió colgado del cerro sin darle bola a nada...así sí es lindo vivir en Argentina, qué decirles. Caminamos muchísimo, fuimos a Peñón del Águila, comimos exquisito, los chicos disfrutaron y nosotros nos llenamos de sol. Ya estoy estresada de nuevo, per bueno, al menos mientras estuve por allá, fue hermoso y cumplí con la promesa que me hice de algún día dormir en La cumbrecita :-)
Ah, en las cabañas nos venía a visitar un gato al que le pusimos Timy.
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