En: Tonucci Francesco, La soledad del niño, Losada, Buenos Aires, 2007.
Hoy se celebran los 20 años de la Convención por los derechos del niño. ¿Y si como sociedad le damos a nuestros hijos el regalo del tiempo? Sí, del tiempo libre de juego, sin escuelas de jornada completísima, tareas ni obligaciones. Claro que hay muchos otros problemas que afectan a la infancia y que no está en nuestras manos solucionar. En cambio hoy mismo podemos empezar por casa cediéndole a nuestros hijos más tiempo libre para ¡jugar!
Lamentablemente mi sobrina (hija del hermano de Maty) tiene y padece unos padres como los de la ilustración. Hay veces en las que pienso que intentan sacarse a la chica de encima. Si, suena cruel, pero la nena padece una enfermedad muy rara y hace unas dietas estrictas, sin leche, manteca, harinas y lo dejo ahí para no seguirla, así y todo la llenan de actividades desde las 8 am hasta cualquier hora de la tarde. Me da pena cuando vamos de visita y la vez dormirse sobre todas las cosas. Bueno, de visita es una forma de decir, porque encontrar un momento en el que esté en la casa es un verdadero milagro.
ResponderEliminarLos chicos deben tener un tiempo para el juego, no importa si estuvieron en el jardín jugando todo el tiempo, porque eso fue algo guiado, no hacen lo que ellos quieren completamente o aquello que tal vez los apasiona y tranporta a otro mundo. La mayoría de los niños de hoy son como pequeños adultos, llenos de obligaciones y responsabilidades. Responsabilidades que les cargan sus padres, no que ellos elijen. Danza, porque fue el sueño de mamá. Jockey, Basquet o fútbol, porque para papá el deporte en equipo es importante. Luego inglés, indispensable en los tiempos que corren; dibujo y música para que sean sensibles y sepan apreciar el arte desde chicos y además se los podrá ver en la mayoría de los talleres del colegio si es que los tiene. Lunes, la granja, para saber de donde viene lo que comemos; martes, natación; miercoles, libre, porque todavía el colegio no tiene una actividad para este; jueves; guitarra y viernes, atletismo.
Pobres criaturas ¿cuándo se les pregunta lo que les gusta o quieren hacer?
"Padres que escuchen a sus hijos se buscan"
es terrible Nancy...
ResponderEliminarte cuento algo, yo cuando era chica tenía una amiga a la que quería muchísimo...tenían muuucha plata. Hubo un año (creo que 3er grado) en donde yo fui todos los días a la casa a jugar con ella y a hacer la tarea...no sabés lo bien que la pasábamos...¡por fin tenía con quien jugar! fui tan feliz....hasta que cuando empezamos 4to grado la inscribieron de golpe en: tenis, karate, alemán, francés, inglés y un taller de arte...y no la vi nunca más :( ella cambió tanto, tanto! Qué pena que sentí...volví a jugar sola en el fondo de mi patio, no porque mi vieja me diera tiempo...sino porque (por suerte) no teníamos plata para bancar esas actividades...
lo recuerdo y me pone triste
¿qué pena no?
Besos Nancy!!!